Cabeza de nuez, breve historia de la mujer zanahoria

Un día te das cuenta de que necesitas una carta de recomendación, de que una carrera universitaria no es suficiente, de que es más fácil ser zanahoria y crecer debajo de la tierra, de que hay que tener cuidado con lo que persigues porque por el camino tu cerebro puede deshidratarse, convertir tu cabeza en cáscara y tu cerebro en nuez.

“¿y si me oxido como un fruto al sol?
Y si ya lo he hecho y sólo soy un fruto seco,
reseco, sin tallo.”

Cabeza de nuez es la simbólica historia de la mujer zanahoria. Una joven cualquiera, representante de una generación criada en la abundancia que llega a la edad adulta con un futuro volátil y una mochila cargada de expectativas y falsas necesidades.
La mujer zanahoria camina con sus peculiaridades pero también con puntos comunes a las realidades universales de la sociedad occidental.