Wangari, la niña árbol
Karlik Danza-Teatro
Karlik Danza-Teatro
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diciembre
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19
sábado
18:00
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20
domingo
18:00
Danza-Teatro
Familiar
Pasado
diciembre · 2015
Una guardabosque se resiste a aceptar la derrota ante el paisaje calcinado de un incendio forestal. Recuerda la fábula que escuchó contar a Wangari Maathai, la Mujer Árbol; la fábula del humilde colibrí, que a pesar del rigor de las llamas del bosque, sigue llevando con su pico una gota de agua, porque hace lo mejor que puede.
Así nos acercamos a Nyeri, una población kikuyu en el corazón de África, ante la mirada sagrada del monte Kenia, donde la niña Wangari Maathai da sus primeros pasos, comienza a descubrir la belleza de la Tierra y los ciclos de la vida y de la muerte. De su madre aprenderá el poder de las semillas y las cosechas y de su bisabuela a tener la paciencia que requiere ver crecer lo sembrado. Pero también descubrirá que el dinero y el interés hieren la Tierra como cuchillos…
La niña Wangari, que escucha la voz dolorosa del Monte Kenia devuelve la esperanza a quienes, como la guardabosques, creen en el vuelo del colibrí.
Wangari Maathai (Nyeri, Kenia – 1940- Kenia, 2011) dedicó toda su vida a dejar un mundo mejor. Fue una mujer luchadora, vitalista y activa, que peleó defendiendo los derechos de las mujeres, los niños y la Tierra. Maathai comprendió que proteger los árboles es garantizar el agua y el alimento para la población, y luchar contra las hambrunas y la mortalidad infantil. Fue la primera africana que obtuvo el Premio Nobel de la Paz, en 2004, por su apoyo al desarrollo sostenible, la democracia y la paz, pero también fue la primera mujer de África Central en obtener un doctorado, y la primera Decana de la Universidad de Nairobi. En 1977 fundó el Movimiento Cinturón Verde (Green Belt), organización dedicada a la reforestación en Kenia, que ha plantado más de 70 millones de árboles. Su lema, Harambee! (empujemos todos juntos, en lengua kikuyu) es símbolo de una acción colectiva por el bien común. Wangari Maathai murió en el año 2011, año Internacional de los Bosques. Su espíritu, creen los suyos, mora en un árbol sagrado del Monte Kenia.
“No hay gestos pequeños”
Noam Chomsky.
Dirección: Cristina D. Silveira
Dramaturgia: Itziar Pascual
Espacio Escénico: Susana de Uña
Elementos escénicos y vestuario: Pablo Almeida y Gonzalo Buznego
Composición y producción musical: Seidú
Letra "Harambee": Itziar Pascual
Voces: Carola Abarzúa, Amaru Araya
Diseño de iluminación: Francisco Cordero
Video creación y animación: Carlos Lucas
Ilustraciones/animaciones vídeo y diseño gráfico: Marcos Polo
Realización Elementos Escénicos y Vestuario: Pablo Almeida, Gonzalo Buznego, La Nave del Duende
Técnico Iluminación: Alfonso Rubio
Técnico sonido y video-proyección: David Pérez
Distribución: Karlik Danza Teatro / La Nave del Duende
Dirección de Producción: David Pérez